miércoles, 5 de noviembre de 2014

energía eólica en Colombia





El calentamiento global, la disminución de reservas de petróleo y gas, así como la incertidumbre en el precio y legibilidaden el suministro de combustibles fósiles están presionando al mundo a diversificar su canasta energética. A la hora de hablar de un ambiente más limpio y de seguridad energética, fuentes renovables, como la energía eólica, adquieren especial interés para afrontar estos, entre otros problemas.

La energía eólica (o energía del aire en movimiento) se usa desde hace cientos de años para labores agrícolas como molienda de grano y bombeo de agua. 

También para propulsión aerodinámica de barcos, de tablas de vela y/o esculturas eólicas (hoy llamado arte cinético). En la actualidad, el uso de la energía eólica como fuente para generación de electricidad, libre de polución, se ha convertido en otra alternativa atractiva y está presentado un enorme crecimiento en el mundo. 

Se debe aclarar que la totalidad de equipos eólicos instalados y en operación, tan solo suministran el 1 por ciento de la energía eléctrica consumida en todo el mundo, sin embargo este nivel de generación de electricidad está aportando cerca del 4 por ciento de la reducción mundial de emisiones de gases de efecto invernadero.

Para finales de 2009, en el mundo se tendrán instalados 140.000 MW para suministro de electricidad con cerca de 100.000 turbinas eólicas instaladas. 
Los países con mayor nivel de penetración en su canasta energética son: Estados Unidos, España, China, Alemania, Dinamarca, Reino Unido, Portugal y Canadá. Solamente, la Unión Europea (UE) tendrá instalados más de 75.000 MW en el 2010, de los cuales al menos 10.000 MW estarán instalados en el mar. El objetivo de la UE para el año 2020 es tener instalados 180.000 MW eólicos, lo cual implica que el 12 por ciento del consumo de electricidad provendrá de la energía eólica. 

Vientos eólicos en Latinoamérica

En América Latina, el total de plantas eólicas instaladas a inicios de 2008 sumaban 550 MW, preferencialmente en Brasil, México, Costa Rica, Argentina, Chile y Colombia. Los programas nacionales más agresivos en la implementación de esta energía son Brasil, Argentina, Chile, México y Costa Rica con proyectos para los próximos 3 años por más de 2.000 MW. Adicionalmente, Brasil, México y Argentina ya cuentan con plantas de producción de equipos eólicos para suplir el mercado latinoamericano.

Colombia cuenta desde el año 2004 con un único parque eólico, Jepirachi, instalado en cercanías del Cabo de La Vela en la Guajira. Durante los dos primeros años de operación, el parque alimentó la red eléctrica nacional con aproximadamente 120 GWh. Las condiciones de viento en el sitio son bastantes favorables, ya que cuenta con velocidades de viento promedio altas casi todo el año; vientos alisios prevalentes en dirección Este-Oeste y baja intensidad de turbulencia del viento, lo cual representa reducidas cargas de vibración en los equipos. 

Jepirachi cuenta con 15 equipos de fabricación alemana de la compañía Nordex, cada uno con una potencia nominal de 1.3 MW, para una potencia nominal total en el parque de 19.5 MW. Cada equipo tiene 60 metros de diámetro y 60 metros de altura de torre. Este se ha considerado como un proyecto piloto, con el propósito de transferencia de tecnología, aprendizaje y entendimiento para futuros proyectos de energía eólica en el país.
 
Potencial en Colombia

Las perspectivas para la energía eólica en Colombia son grandes, sobre todo en el Caribe, en donde el recurso eólico ha demostrado ser alto. Solamente en esta región, incluida la Guajira, se cuenta con un potencial efectivo de conversión de energía eólica a energía eléctrica de 20.000 MW, en parques eólicos. Ahora, si se quisiera extender a zonas de playa o al mar, este potencial se podría duplicar.

La evaluación del recurso eólico se realiza a alturas entre 60 y 100 m sobre la superficie. Entre las zonas con buenos vientos en el territorio nacional se encuentran las Islas de San Andrés y Providencia, los alrededores de Villa de Ley-va, Cúcuta, Santander, Risaralda, el Valle del Cauca, el Huila y Boyacá. 

Valorar su verdadero potencial como fuente de suministro energético ampliaría el aporte de Colombia a la reducción mundial de emisión de gases de efecto invernadero.

Es necesario mencionar que en el país se han realizado diseños locales comerciales innovadores como la aerobomba Gaviotas. Este desarrollo se volvió comercial en 1977. En 1979, se desarrolló el molino de viento el Gavilán, estos dos proyectos contaban con aspectos novedosos para su operación en bombeo de agua y fueron la base de fabricación de la aerobomba Jober, comercializada en Duitama, Boyacá. 

En el ámbito universitario, en los años 80, profesores y estudiantes de la Universidad Nacional realizaron importantes avances en el desarrollo de equipos eólicos para generación de electricidad, sin embargo, estos esfuerzos fueron truncados por falta de financiamiento. Otras universidades han continuado en estos esfuerzos de entender la tecnología eólica, y se hacen visibles trabajos importantes en la Universidad Nacional en Medellín, con el apoyo de las Empresas Publicas de Medellín, y la Universidad de Los Andes, que con el trabajo de estudiantes y profesores aportó al desarrollo del equipo comercial Gaviotas.

Del interés por la energía eólica en Colombia y la búsqueda de otras fuentes renovables de energía, están emergiendo acciones como, por ejemplo, el estudio recientemente realizado por las universidades Nacional en Medellín y Los Andes sobre la regulación para incentivar las energías alternas y la generación distribuida, el concurso abierto para el financiamiento de proyectos emprendedores en energías limpias y renovables y eficiencia energética, financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo, el proyecto actual de la Cámara de Comercio de Bogotá con el BID–FOMIN sobre la promoción de eficiencia energética y el uso de energías limpias para la pequeña y mediana industria, y el foro que tendrá lugar en Medellín, el 7 de Julio, sobre los elementos necesarios para la promoción de la energía eólica en Colombia, organizado por la Asociación Latinoamericana de Energía Eólica (LAWEA).

PROBLEMAS POLITICO-SOCIALES DE LA ENERGIA EOLICA


Cabe destacar que, aun sabiendo que la energía eólica es una energía limpia y que aporta, para los países, un beneficio tanto económico (por evitar la importación de energías fósiles de países extranjeros) como medioambiental, muchas personalidades políticas no están de acuerdo en instalar energía eólica en sus localidades, alegando impacto visual e ignorando todos los beneficios a nivel general que supondría la instalación de parques eólicos.

Si ahora, después de cientos de años, los molinos eólicos de nuestro entrañable Don Quijote de la Mancha, se han convertido en patrimonio histórico, por qué no pensar que los actuales aherogeneradores pueden ser la mejor aportación a la historia de nuestra generación, respetando al medio ambiente y a las personas. Me gustaría oír en un futuro: “unos pocos se atrevieron a fomentar una energía que por aquél año 1995 no podía competir con el petróleo en costes y ahora estamos muy orgullosos de ellos”.


Como nota a lo anterior, decir que es verdad, que es una energía no tan barata respecto a los costes de la inversión, como lo puede ser una instalación de ciclo combinado con 450.000 € por Mw, pues un aerogenerador cuesta aproximadamente unos 900.000 € por cada Mw, pero ¿cuánto cuesta reparar la emisión de CO2 a la atmósfera?, ¿cuánto cuestan las enfermedades generadas por la contaminación atmosférica?, ¿cuánto cuesta reponerse de un desastre nuclear?, y sin embargo ¿cuánto cuesta captar una energía que nunca se acaba?

FUTURO DE LA ENERGÍA EÓLICA



Actualmente muchos países cuentan con la energía eólica como una fuente de energía primaria en pleno desarrollo. Los países que destacan como futuros grandes generadores de energía eólica son: China, India, Sudamérica y EE.UU. De hecho, China cuenta ya con grandes fabricantes de aherogeneradores que han conseguido tecnologías muy fiables.

Una de las formas de energía eólica más conocida es la energía eólica terrestre, ya que estamos familiarizados a ver aherogeneradores en tierra, sin embargo, la superficie del mar es tan extensa, y se presenta en ella el recurso eólico más abundante de la tierra, que se han desarrollado en los últimos años tecnologías para instalar aherogeneradores en el mar. Esta forma de energía eólica se conoce como energía eólica offshore o eólica marina.

domingo, 26 de octubre de 2014

características de la energía eólica

Para comenzar a hablar sobre el tema de las características de la energía eólica, deberemos hablar acerca de las energías renovables, que debemos saber que esta es una de las características de la energía eólica más importantes y esenciales. Se llama energías renovables a las energías que provienen de la naturales, y son virtualmente inagotables, por la inmensa cantidad de energía que poseen y porque tienen la particularidad de renovarse por los medios naturales.


Las principales y más importantes características de la energía eólica

También se puede destacar que mientras los aerogeneradores realizan la recolección de la energía eólica emiten ruidos molestos y muy fuertes, por ello es recomendable instalar los aerogeneradores lejos de las viviendas, estancias o de lugares dónde haya civilización. Es muy importante saber también que, actualmente se está trabajando en este aspecto para corregir este inconveniente de los aerogeneradores. Algunas de las características de la energía eólica más importantes, es que son de gran ayuda en lugares alejados dónde se dificulta muchísimo la llegada de electricidad
En estos lugares la energía eólica es de mucha ayuda. Se instalan parques eólicos (si es que se precisa energía eléctrica para una zona más extensa) o simplemente un aerogenerador, que es suficiente para abastecer la electricidad de una vivienda o una estancia, o una escuela, en fin. Así se facilita amplia mente la posibilidad de que cada vivienda disponga de la luz necesaria, por supuesto para que también funciones las televisiones, radios, computadoras, lavar ropas, aires acondicionados o ventiladores tan necesarios en zonas dónde las temperaturas son muy elevadas, o también para comunicación, como teléfono, tan importantes e indispensables ante alguna emergencia.
Otra de las características de la energía eólica es que puede producir electricidad para abastecer a un parque eólico o grandes centrales de electricidad. Por ejemplo instalar una de ellas en un pueblo en el que es muy difícil la disponibilidad de energía eléctrica corriente. Eso sí, debemos disponer de muchos aerogeneradores de gran potencia, ya que tengamos en que los pueblos constan de muchas viviendas y por consiguiente de la cantidad de aerogeneradores necesarios para abastecer la electricidad de todas. Como hemos visto las características de la energía eólica son en mayoría muy favorables.
Además de ser un tipo de energía natural, y por supuesto renovable, hace que sea mucho más fácil la obtención de la misma. Esto no sólo nos beneficia a nosotros en el aspecto económico si no también en el aspecto de los cuidados de nuestro planeta. La energía eólica es muy segura y disponible, pero recordemos que sí o sí precisaremos de las máquinas especializadas para la recolección de la misma, de otra manera sería muy difícil e inclusive casi imposible. Debemos disponer de un capital inicial bastante elevado para la compra e instalación del mismo. Luego de ello, que es lo principal, los gastos serán prácticamente nulos, pero debemos tomar conciencia y mantener periódicamente los aerogeneradores en perfecto estado, para que no se dañen y se conserven la mayor cantidad de años posibles.

jueves, 9 de octubre de 2014

Historia


La energía eólica no es algo nuevo, es una de las energías más antiguas junto a la energía térmica. El viento como fuerza motriz se ha utilizado desde la antigüedad. Así, ha movido a barcos impulsados por velas o ha hecho funcionar la maquinaria de los molinos al mover sus aspas. Sin embargo, tras una época en la que se fue abandonando, a partir de los años ochenta del siglo XX este tipo de energía limpia experimentó un renacimiento.

La energía eólica crece de forma imparable ya en el siglo XXI, en algunos países más que en otros, pero sin duda alguna en España existe un gran crecimiento, siendo uno de los primeros países, por debajo de Alemania a nivel europeo o de Estados Unidos a escala mundial. El auge del aumento de parques eólicos se debe a las condiciones favorables de viento, sobre todo en Andalucía que ocupa un puesto principal, entre los que se puede destacar el Golfo de Cádiz, ya que el recurso de viento es excepciona

Cómo se produce y obtiene

La energía del viento está relacionada con el movimiento de las masas de aire que se desplazan de áreas de alta presión atmosférica hacia áreas adyacentes de baja presión, con velocidades proporcionales al gradiente de presión.
Los vientos son generados a causa del calentamiento no uniforme de la superficie terrestre por parte de la radiación solar, entre el 1 y 2 % de la energía proveniente del sol se convierte en viento. De día, las masas de aire sobre los océanos, los mares y los lagos se mantiene en frías con relación a las áreas vecinas situadas sobre las masas continentales.
Los continentes absorben una menor cantidad de luz solar, por lo tanto el aire que se encuentra sobre la tierra se expande, y se hace por lo tanto más liviana y se eleva. El aire más frío y más pesado que proviene de los mares, océanos y grandes lagos se pone en movimiento para ocupar el lugar dejado por el aire caliente.
Para poder aprovechar la energía eólica es importante conocer las variaciones diurnas y nocturnas y estacionales de los vientos, la variación de la velocidad del viento con la altura sobre el suelo, la entidad de las ráfagas en espacios de tiempo breves, y valores máximos ocurridos en series históricas de datos con una duración mínima de 20 años. Es también importante conocer la velocidad máxima del viento. Para poder utilizar la energía del viento, es necesario que este alcance una velocidad mínima que depende del aherogenerador que se vaya a utilizar pero que suele empezar entre los 3 m/s (10 km/h) y los 4 m/s (14,4 km/h),